Hace unos años se puso de moda hacerse selfies y las autofotos empezaron a aparecer en todas partes.
Las empresas decidieron emplearlas para hacerse más próximos a sus consumidores, los fabricantes de nuevas tecnologías se lanzaron como locos a crear teléfonos que resultaban ‘friendly’ para los propósitos de los usuarios que cada vez se hacían más selfies y selfie se convirtió en la palabra del año.
Pero la tendencia, como todo, acabará pasando y la fiebre del selfie irá bajando. La alternativa está a la vuelta de la esquina y, según las previsiones de Gartner, será un poco más compleja.
En 2017 el vídeo se convertirá; en el nuevo selfie, según las previsiones de la consultora. Gartner espera que durante los próximos cuatro años los consumidores vayan migrando de las fotos estáticas a los vídeos , con un crecimiento espectacular de los vídeos en directo. El estar en un sitio y subir lo que está pasando en tiempo real será una tendencia cada vez más consolidada entre los consumidores y estos empezarán a usarla de forma cada vez más habitual.
Y así será como la tendencia emergente sustituirá a la costumbre imperante en los últimos años.
Teniendo en cuenta que a cierre de año se habrán hecho y publicado (y solo en 2014) un billón de foto, el cambio parece una cosa más bien sorprendente, aunque como recuerdan los vídeos están aumentando en importancia y empieza a incorporarse con más facilidad a los nuevos dispositivos electrónicos.
Aunque el vídeo servirá sobre todo (y por eso desbancará al selfie) para que los consumidores se expresen, lo cierto es que estos contenidos tendrán más funcionalidades. Se incorporarán a las ventajas del hogar conectado (como puede ser, por ejemplo, el hecho de que los sistemas de control de los bebés vayan a incorporar el vídeo en directo) o a las relaciones de los consumidores con las marcas, que tendrán ahora una herramienta mucho más versátil a su disposición.
«La próxima generación de servicios y productos para consumidores tienen un tema principal en común y ese es el vídeo», explica el director de investigación en Gartner, Brian Blau. «Esto significa que hay que incorporar el vídeo u otras tecnologías de tiempo real en los productos para conseguir el engagement de los usuarios en eventos en directos y para permitir una comunicación más personalizada, ofrecer mejor atención al cliente y proveer la mejor experiencia de vídeo y televisión en las casas conectadas».
Smart TV y hogares conectados
Y en esa carrera mucho tendrán que ver los cambios que implicará el nuevo hogar conectado. Las estimaciones de la consultora apuntan a que en 2018 el 87% de las televisiones serán smart TV, esto es, televisiones inteligentes y conectadas a internet, que sustituirán a la llamada ‘caja tonta’ y se convertirán en las más habituales en los hogares.
Las televisiones inteligentes no solo permitirán acceder a un abanico mucho más amplio de contenidos o ver esos vídeos que los propios consumidores generan sino que además permitirán interactuar con muchos elementos de los propios hogares. Así, el 76% de las aplicaciones del hogar inteligente serán accesibles desde la tele.
Pero no solo crecerán las televisiones inteligentes, sino que en general serán mucho más recurrentes las soluciones smart en el hogar. Los servicios para el hogar conectado irán bajando progresivamente de precio, al tiempo que el interés de los consumidores por estas tecnologías no caerá, lo que hará que se conviertan en más populares y accesibles. En 2018, sus precios serán un 50% más bajos de lo que son ahora.
Las selfies más peligrosas!!
Fuente: Puro Marketing